¡NO NECESITAMOS PERMISO PARA SER LIBRES!

“La universidad no la tomamos prestada de nuestros padres

Sino que la heredamos a nuestros hijos”

Un caluroso y fraterna saludo revolucionario a l@s estudiantes, profesor@s, trabajador@s, a toda la comunidad universitaria; en estos momentos coyunturales donde nuevamente esta en vilo la educación de nuestro pueblo, siendo deber y obligación de tod@s, tomar las armas de las ideas, de la palabra, del debate y de las movilizaciones preparándonos para la ardua batalla por la educación pública.

El gobierno de Santos está adelantando una serie de reformas ligadas al país que amparan la burguesía en el documento Colombia Visión 2019 vendiendo nuestros recursos naturales a las grandes multinacionales y fomentando la inversión del sector privado en la educación pública colombiana, llevándola paulatinamente a la privatización.

La propuesta de reforma a la Ley 30 de 1992 lleva a la desaparición de la universidad pública, pensante, humanista y al servicio del pueblo, para convertirla en una empresa que cree fuerza de trabajo barata y cualificada, cumpliendo con los indicadores y metas relacionadas a las necesidades del mercado laboral y la eficiencia empresarial que estas requieran e introduciendo dentro de su filosofía principios ajenos a su naturaleza académica.

La nueva Ley 30 promueve que el gobierno se desentienda de financiar la universidad pública y el acceso a la misma quede determinado por la capacidad económica de los jóvenes, que como todos conocemos la inmensa mayoría no cuenta con el sustento para pagar los nuevos costos. De esta manera se verán obligados a obtener créditos mediante el ICETEX, el cual será fortalecido por parte del gobierno y endeudará en promedio 20 años a cada persona que lo utilice.

Los nuevos recursos serán botín por el cual tendrán que batallar las universidades públicas, las consecuencias serán la baja calidad académica, la deserción estudiantil y la des-contratación directa para trabajadores y profesores; esto deja por fuera cualquier alternativas de vida digna para lo jóvenes que terminarán alimentando una guerra lucrativa para las clases altas y las elites económicas de los estados colonialistas que por medio de la financiación de ésta, buscará garantizar la seguridad para las transnacionales y apoderamiento de nuestros recursos, como el suelo fértil, las minas y todas nuestras riquezas naturales, terminando de entregar nuestra soberanía.

De este modo, las jornadas de protesta que se vienen adelantando en las distintas universidades del país no pueden ser catalogadas como actos terroristas y sin sentido, ya que ese es el discurso mediático del gobierno oligarca; estas manifestaciones son la expresión de rechazo y repudio ante las políticas agresivas e imperialistas de la burguesía apátrida que a través de trampas, falsedades y violencia, intentan imponer el modelo neoliberal direccionado por la Organización Mundial del Comercio (OMC) y el Banco Mundial.

Ahora bien, la respuesta de Santos a la masiva resistencia del estudiantado, se refleja en el famoso “Plan de Acción” que el Señor Ramos está implementado y su política de seguridad como: La carnetización, expulsión de vendedores, el cerramiento perimetral, iluminaciones, cámaras entre otros. Recordemos que esta estrategia de seguridad como forma de persecución y control del fervor revolucionario que históricamente ha caracterizado la universidad, nos ha costado las vidas de compañeros, como la de Jhonny Silva, William Ortiz, Katherine Soto y Julián Andrés Hurtado representante estudiantil asesinado el 5 de Abril de 2006 por paramilitares al servicio del gobierno; Vemos entonces que esta política únicamente quiere acallar las voces y asesinar cualquier tipo de oposición.

Para finalizar saludamos a las mesas de trabajo formadas en las distintas asambleas del semestre en curso, proponemos que estas sean de carácter permanente e invitamos a la participación masiva del estudiante, para adelantar las distintas formas de manifestación dentro y fuera de los campus universitarios, los cuales deben ir en miras de la construcción del poder popular y estudiantil, a partir de la reflexión y debate amplio de las problemáticas locales y nacionales, no solo sobre la educación que Colombia necesita y se merece, sino sobre una verdadera justicia social.

CEB-Fuerza de Acción Rápida