JOSÉ MARTÍ: IDEARIO DE LA VANGUARDIA

José Martí nace el 28 de enero 1853 en la Habana, Cuba. Toda su vida consagrada a la lucha por la libertad del pueblo cubano y por la Unidad de los pueblos latinoamericanos. El 19 de mayo cae mortalmente herido en una acción de guerra en Dos Ríos.

Tal vez sólo como Simón Bolívar o Sarmiento, Martí escribió, como quien sangra, al fragor de la hora suprema en la que sentía la urgencia de intervenir en las situaciones críticas de su pueblo. Desposeído de todo interés aparte del anhelo de conducir a su pueblo cubano a la libertad, consagro desde los 17 años en su presidio político, a la organización, agitación y movilización de los ejércitos cuyo resultado, después de su entrega, es realidad el anhelo de independencia en contra del obstinado gobierno español. Pero no fue sólo esa España déspota e imponente que luchaba Martí, en sus escritos advertía la presencia del águila feroz de la América Sajona, Estados Unidos, acechaban el futuro de nuestros pueblos como también lo decía Simón Bolívar, la presencia del imperialismo es grande y hay que combatirlo. Martí nos dice: “Los pueblos de América son más libres y más prósperos a medida que se apartan de los Estados Unidos”.

José Martí dirigió su pluma no sólo a su patria, Cuba, sino que escribió a “Nuestra América”, la magna Patria Grande de todos los hispanoamericanos, con vehemencia y pasión; habló del obrero, del ciudadano, del hombre y la mujer como responsables de la construcción de la sociedad, su fusil y pluma se combinaron, las ideas fueron trincheras y las trincheras argumentaban sus ideas, atendiendo su función no sólo de intelectual sino de combatiente en la creación de una nueva patria, para todos. Entre sus numerosos escritos resaltemos piezas como “Nuestra América”(1891), “El manifiesto de Montecristi”(1895) o “El discurso en honor a Bolívar” son, una de las tantas de su legado primordial en la construcción de la Patria Grande que soñó Bolívar, y otros intelectuales de la América comprometidos por su independencia; es así la importancia de Martí de los sueños libertarios de los pueblos que ahora hablamos de la Magna Patria Martiana y Bolivariana, dos grandes pensamientos que se complementan para contribuir en la construcción y dar un legado a las generaciones de los pueblos hacia la Unidad. Es hora de retomar el pensamiento latinoamericano, es hora de leer y cabalgar en los escritos de nuestros pensadores que han hablado de una patria diferente a las visiones extranjeras, es hora de levantar la espada y decir que un nuevo camino se esta construyendo con las visiones de nuestros Libertadores.

Tomas Trinidad