¿HEMOS VENIDO A ESTA UNIVERSIDAD UNICAMENTE A ESTUDIAR?

Pues no!, posiblemente para algunos fue fácil quedar en Univalle, y se les hincha el pecho cuando hablan de ella, para otros fue mas difícil, hoy en día existen muy pocas claridades sobre la verdadera formación a la que tenemos derecho por ser educados en una universidad pública, desgraciadamente las políticas actuales de gobierno impiden y arrebatan gradualmente una formación critica y menos dogmatica, que en lugar de enseñarnos contenidos extensos, aburridores y parcializados al ojo y boca de un profesor, nos brinden las herramientas para forjar un pensamiento propio y productora de nuevo conocimiento, conocimiento aplicado verdaderamente para el servicio de nuestra ciudad, de nuestro espacio, de nuestro territorio y sobre todo, al servicio de aquellos hermanos que comparten nuestro sitio de vida, Colombia; es fácil ver, que la educación superior actual, lejos de ser revolucionaria y humana, ha terminado siendo una herramienta que agudiza el individualismo, el egoísmo y el egocentrismo de aquellos que estudian. Y como si fuera poco, esta educación actual enmarca miserablemente la esclavitud de nuestro esfuerzo y nos condena a vivir bajo la sombra de empresas privadas que hoy por hoy son mas dueñas ellas de este país, que nosotros sus habitantes, nos hace falta entender algunos puntos sobre nuestra formación, no?

De este modo, cabe preguntarse para los que comentan sobre aquellos que nos tapamos el rostro y que constantemente están criticando o apoyando, ¿Debe haber una razón específica para expresarse? ¿Tenemos que esperar una coyuntura específica para reaccionar? Personalmente creo que las razones sobran; las razones están desde que salgo de mi casa (afortunadamente soy de los pocos en este país que tiene una), Y veo a cientos y cientos de personas que mendigan alimento en las calles, sin fuerza alguna para revelar su gran inconformidad, razones sobran cuando en las noticias aparecen todos los días los triunfos de la derecha salvaje, paramilitar y sin respeto alguno por el ser humano, esta derecha imperialista que solo respeta a aquellos que tienen dinero o aquellos que tienen empresas. 

Estos triunfos de la derecha y para no alargarme tanto se ven fácilmente en ejemplos recientes, como los desalojos de familias que no tienen vivienda digna, yo me pregunto ¿Si la tierra es de todos porque debe haber otra persona con la autoridad para sacarme de ella? Y si no tengo como pagar la tierra en donde vivo porque el dinero está pesimamente repartido, entonces qué hago? Debo irme a otro planeta?, Como alguien se proclama dueño de la tierra? Si desde el momento en que nazco y veo la luz, por el simple hecho de vivir debería tener derecho a ella!. Los triunfos de la derecha son muchos, se ven fácilmente en las leyes impuestas del gobierno, leyes que benefician a unos pocos y dejan en la miseria a muchos. Triunfos en las masacres de estado, en la corrupción de gobierno, en los múltiples robos frenteros a nuestros recursos, etc.

Por eso compañeros, razones para expresar el repudio que siento, sobran; RAZONES HAY SIEMPRE PARA COMBATIR, PARA DEBATIR Y PARA TROPELEAR. Nuestros actos (simbólicos en su mayoría) son realizados con la intención de ser un ejemplo libre de rebeldía para los demás, de crítica y de pensamiento propio, pensamiento que debe estar encaminado hacia el sueño de otro país, de otro mundo, de otra vida, una vida que no sea solamente para nosotros, sino para aquellos que están por venir, para nuestros hijos y nuestros nietos, un mundo de alegría, pero sobre todo un mundo lleno de vida digna y de libertad.

Estamos aquí gritando y levantando nuestro puño porque hemos decidido romper esa larga cadena de esclavitud a la que hemos sido sometidos desde hace 518 años, cuando América queda invadida y desde entonces condenada a servir arrodillada ante los pies de países más desarrollados, que a través de multinacionales y del dinero ejercen control económico, político e ideológico. De este modo Los militantes del Comando Estudiantil Bolivariano (entre otros movimientos) hemos decidido emprender la búsqueda del grado más honroso del ser humano, el ser revolucionario (ché). Un ser revolucionario es un ser que se caracteriza por profundos sentimientos de amor en todo lo que hace, y todo aquello que hace, lo hace con el corazón. El ser revolucionario es un ser soñador, romántico y muy firme, pero también sensible. No puede ser un perezoso y debe ser siempre un ejemplo de disciplina, y por ese motivo en ningún campo de batalla (calles, salones de clase, debates, etc), puede mostrar cansancio ni agotamiento, el revolucionario debe mostrar siempre amor y firmeza, y es esencial porque hay que recordar que muchos nos están viendo y nos están juzgando, por este motivo, los militantes siempre tenemos que procurar transmitir nuestro mensaje lleno de energía, y nuestra principal fuente de energía será la convicción y el pleno convencimiento por lo que estamos haciendo y las razones por las que estamos luchando, que son razones de libertad.

En ese sentido, las fuerza de un ejército no se mide por la cantidad de armas o recursos disponibles que este tenga, sino por los motivos y razones que llevan a una persona a pelear, por esto, los soldados del gobierno que han decidido traicionar a su pueblo y empuñar un arma en su contra, y los de su misma clase social, solo tienen motivos de miseria y necesidad, atacando únicamente a cambio de un sueldo; en contraposición, a nosotros, los militantes universitarios y revolucionarios, nos motivan razones cargadas de espíritu, cargadas de amor, nos motivan razones de libertad. Estas son razones de mucho más valor y que si las tenemos de nuestro lado y las comprendemos verdaderamente, nuestro ejército así sea de 100 personas con palos y piedras, contra mil armados de la manera más sofisticada, será vencedor y triunfador. Si tenemos de nuestro lado a nuestro corazón, seremos invencibles.

Hemos venido a esta universidad a formarnos como revolucionarios, como personas liberadas de cadenas morales y miedos, para aprender a ser firmes y muy humanos, hay que entender que nuestro paso por la tierra no puede ser tan simple como nacer, crecer, reproducirse y morir, nuestro paso por la vida debe ser de revolución, y de cambio, debe ser un acto reivindicador de nuestras cualidades más humanas y mas revolucionarias. En nuestra valentía, nuestra rebeldía, y nuestro amor por la lucha están las herramientas para derrotar a cualquier verdugo. Solo recuerden que para ello, deben ofrecer como principal arma, su corazón.

8 y 9 DIAS DEL ESTUDIANTE COMBATIVO Y REVOLUCIONARIO

Camarada Marcos