
Pero el tropel es solo una parte de esta larga y compleja lucha, el tropel es apenas el comienzo de una formación integral, una formación que enriquece al ser; el tropel es un acto simbólico para que desde el momento en que iniciamos como militantes, nos quitemos las cadenas morales con que nos han educado, y nos liberemos de los miedos que el gobierno nos ha impuesto. El tropel como acto simbólico, debe ser un ejemplo para los demás de rebeldía, de crítica y de pensamiento propio, pensamiento que debe estar encaminado hacia el sueño de otro país, de otro mundo, de otra vida, una vida que no sea solamente para nosotros, sino para aquellos que están por venir, para nuestros hijos y nuestros nietos, un mundo de alegría, pero sobre todo un mundo lleno de vida y de libertad.
Estamos aquí porque hemos decidido romper esa larga cadena de esclavitud a la que hemos estado acostumbrados desde hace 500 años, cuando América conquistada, quedó condenada a ser la sirvienta y la prostituta de países más desarrollados, de multinacionales, del dinero y del imperialismo. De este modo Los militantes de los distintos movimientos hemos decidido emprender la búsqueda del grado más honroso del ser humano, el ser revolucionario (ché). Un ser revolucionario es un ser que se caracteriza por profundos sentimientos de amor en todo lo que hace, y todo aquello que hace, lo hace con el corazón. El ser revolucionario es un ser soñador, romántico y muy firme, pero también sensible. No puede ser un perezoso y debe ser siempre un ejemplo de disciplina, y por ese motivo en ningún campo de batalla (calles, salones de clase, debates, etc), puede mostrar cansancio ni agotamiento, el revolucionario debe mostrar siempre amor y firmeza y es esencial porque hay que recordar que muchos nos están viendo y nos están juzgando, por este motivo, los militantes siempre tenemos que procurar transmitir nuestro mensaje lleno de energía, y nuestra principal fuente de energía será la convicción y el pleno convencimiento por lo que estamos haciendo y las razones por las que estamos luchando, que son razones de libertad.
En ese sentido, la fuerza de un ejército no se mide por la cantidad de armas o recursos disponibles que este tenga, sino por los motivos y razones que llevan a una persona a peliar, por este motivo, los soldados traidores del gobierno que han decidido traicionar a su pueblo y empuñar un arma contra su mismo pueblo y los de su misma clase social, solo tienen motivos de miseria y necesidad, y atacan únicamente a cambio de un sueldo; En contraposición, a nosotros, los militantes universitarios y revolucionarios, nos motivan razones cargadas de espíritu, cargadas de amor, nos motivan razones de libertad. Estas son razones de mucho más valor y que si las tenemos de nuestro lado y las comprendemos verdaderamente, nuestro ejercito asi sea de 100 personas con palos y piedras, contra mil armados de la manera mas sofisticada, será vencedor y triunfador. Si tenemos de nuestro lado a nuestro corazón, seremos invencibles.
Por este motivo compañeros, nuestra valentía, nuestra rebeldía, y nuestro amor por la lucha son capaces de derrotar a cualquier arma. Solo recuerden que para ello, deben ofrecer como principal arma, su corazón.
8 y 9 de junio, días del estudiante revolucionario
Marcos
1 comentario:
It can be a customized and personalized method of documenting the key 9
months of one's life. Once they transition out from the "completely new" phase, they may well not just fall asleep anytime and anywhere.
Also visit my blog; baby swing
Publicar un comentario